lunes, 10 de octubre de 2011

ZEIT


Un año, una semana... ¿qué es el tiempo?
¿Y con qué facilidad pasa?
Pararse a pensar qué hice ayer, suele resultar fácil;
cuando lo hago pensando en un tiempo pasado, salta la añoranza al pensar las personas importantes que deje atrás, algunas para siempre y otras por un tiempo.
Me duele saber que el tiempo pasa, que nos depara un futuro incierto y sobretodo duele no poder para el tiempo cuando más lo necesitas.
No nos queda otra, que llenarnos la boca de hasta luegos, de hasta la vista. Pero, ¿hasta cuando?
Solo hay una respuesta, y es el tiempo lo dirá; es él el que decidirá dónde estaremos, con quién y de qué manera.
El mundo a veces se me queda pequeño.

P.D.: Odio las despedidas sin fecha de caducidad